Brasil será un país considerado viejo en el año 2050. Gabriel Mongi nos explica cómo Brasil está atravesando un proceso de envejecimiento poblacional que hará que dentro de unos años gran parte de sus habitantes sean de edad avanzada.
¿A qué se debe esta afirmación? ¿Cómo un país es considerado viejo y cómo llega a tal situación?
“Brasil se encuentra en medio de una profunda transformación socioeconómica impulsada por sus cambios demográficos”, señala el texto divulgado por el Banco Mundial hace unos días en Río de Janeiro.
El fenómeno es llamado “bono demográfico” y se produce cuando “la fuerza laboral es mucho mayor a la población dependiente”. “Este es un punto de inflexión que en Brasil debe durar hasta 2020, pero cuyos impactos durarán indeterminadamente”, continúa el informe.
“La población anciana crecerá más que el triple en las próximas décadas, de menos de 20 millones en 2010 para aproximadamente 65 millones en 2050″, alerta.
En Brasil habitaban en 2010 más de 190 millones de personas, una cifra que crecerá a 215,3 millones en los próximos 40 años, según datos del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
Este cambio demográfico se traducirá en crecimiento económico, precisa el BM, que insiste en que paralelamente Brasil debe impulsar cambios drásticos en sus políticas sociales.
“Brasil se embarcó en un proceso de desarrollo que lo está llevando a alcanzar índices sociales y demográficos de primer mundo, pero con sistemas e instituciones heredadas de otro contexto”, subraya el informe.
El fenómeno es llamado “bono demográfico” y se produce cuando “la fuerza laboral es mucho mayor a la población dependiente”. “Este es un punto de inflexión que en Brasil debe durar hasta 2020, pero cuyos impactos durarán indeterminadamente”, continúa el informe.
“La población anciana crecerá más que el triple en las próximas décadas, de menos de 20 millones en 2010 para aproximadamente 65 millones en 2050″, alerta.
En Brasil habitaban en 2010 más de 190 millones de personas, una cifra que crecerá a 215,3 millones en los próximos 40 años, según datos del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
Este cambio demográfico se traducirá en crecimiento económico, precisa el BM, que insiste en que paralelamente Brasil debe impulsar cambios drásticos en sus políticas sociales.
“Brasil se embarcó en un proceso de desarrollo que lo está llevando a alcanzar índices sociales y demográficos de primer mundo, pero con sistemas e instituciones heredadas de otro contexto”, subraya el informe.
Este bono demográfico, que genera los grandes cambios poblacionales, tiene que ver con una fuerza laboral que es mayor a la población dependiente. Según Gabriel Mongi, Brasil es un país con una enorme cantidad de habitantes, por lo que es una novedad insólita y preocupante que en unos años la población será, en su mayoría, de edad avanzada. Esto no sucede en muchos países, menos en los importantes a nivel económico y turístico como lo es Brasil.
Sin embargo, según el Banco Mundial, este cambio demográfico puede traer beneficios para los vecinos. En este informe se precisa que estos grandes cambios se verán reflejados en un crecimiento económico importante, y la promoción de cambios relevantes en las políticas sociales.
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